¿Has pensado alguna vez en esta palabra? En castellano el prefijo “pre” significa previo, anterior a algo en espacio y tiempo. Eso es lo que nos dice la RAE en su definición. Lo que pasa es qué sufijo, qué palabra ponemos después. No es lo mismo si le ponemos la palabra “fijo”, que si le ponemos “ocuparse”. Si hablamos del “pre – fijo” estaremos haciendo referencia al número previo que hay que marcar antes del número de teléfono al que queremos llamar. Por ejemplo cuando estamos llamando a España desde fuera, deberemos marcar previamente el 34 y después el número de teléfono con el que deseamos contactar.
Y si estamos hablando de “pre – ocuparse”, lo que estaremos haciendo es ocuparnos de algo de forma anticipada, pero además, de forma negativa. Según la definición de la RAE, “preocuparse” es “algo que ha ocurrido o va a ocurrir, producir intranquilidad, temor, angustia o inquietud.”. Es decir, que cuando nos preocupamos estamos anticipando algo de forma negativa. No estamos viendo eso que va a acontecer como algo positivo, sino como algo perjudicial. No le vemos ventajas. Todo son inconvenientes. Y aquí entran en juego, como siempre, todos los Principios, pero sobre todo, en este caso el Principio de Mentalismo y el Principio de Vibración.
El Principio de Mentalismo porque al ver la situación como negativa, estamos “programando”, con nuestra mente, que acontezca eso tan negativo que estábamos pensando. “No le va a gustar. Me va a echar. ¿Y ahora yo que hago sin este trabajo?” Y así un infinito de “premoniciones” que rondan cual tiovivo por nuestra cabeza.
A esto le tenemos que sumar nuestra vibración. Con pensamientos negativos de este tipo, nuestra vibración baja (Principio de Vibración). ¿Qué pasa entonces? Que sí, que lo haremos genial, pero el trabajo que hagamos tendrá una baja vibración y las posibilidades de que le guste serán menores porque su energía será pobre. Aunque hayamos dado con algo como la ecuación de Einstein de E=mc². Si estamos apagados con lo que le estamos presentando, difícilmente le gustará. Aunque sea el oro más bello del mundo.
En definitiva, te invito a que borres de tu vocabulario la palabra “preocupar”. ¿Por cuál la puedes sustituir? “Me estoy ocupando.” “Estoy haciendo.” Lo que tú quieras, pero algo que siempre te haga sentir bien y que tu vibración suba cuando pienses en ello.
-Sara Estébanez-
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