– ¡De verdad, estoy cansada! Mi marido parece un niño de cuatro años. Siempre hace las cosas sin pensar. ¡Es un cabra loca! Siempre está jugando. Juega a mil cosas: fútbol, pádel, tenis… Y hasta la gente que juega con él lo dicen, que hace gestos movimientos o acrobacias que son una locura. Y claro, con tanta locura, el otro día se cayó y se ha roto la pierna por varios sitios. Le han tenido que operar de urgencia.

– ¿Te puedo hacer una pregunta personal?

– Mmmm…. Sí.

– ¿En qué lado de la cama dormís cada uno?

– ¿En qué lado de la cama dormimos? ¿Eso qué tiene que ver? Lo importante es su pierna. – Contestó un poco aforada.

– Bueno, no sé. Veamos y luego te cuento. ¿En qué lado de la cama duerme él y en cuál tú?

– Yo duermo a la derecha y él a la izquierda.

– ¡Claro! Entonces es normal que actúe como un niño.

– No entiendo nada. ¿Me lo puedes explicar? Porque no le veo sentido a nada.

– Si tú, que eres su mujer, duermes a su derecha, estás haciendo la función de su madre. Los padres, deben estar siempre a la derecha y los hijos a la izquierda. Y en el caso de las parejas, el hombre a la derecha y la mujer a la izquierda.

– Entonces, ¿qué pasa si en la pareja se invierten las posiciones?

– Pues que la mujer estará haciendo la función de madre de su pareja. Y el hombre es su hijo.

– Es decir, ¿yo estoy siendo la madre de mi pareja y por eso se comporta como un niño?

– ¡Efectivamente! Pero es más, esto no sólo influye a nivel de comportamiento del hombre o de la mujer. Él actúa como un niño y tú siempre estás regañándolo. ¿A que sí?

– Pues sí. ¡Es que me pone de los nervios!

– Claro, comportamiento típico de una madre en relación a su hijo. Y lo que te decía hay más. ¿Qué hijo se va a acostar y tener relaciones sexuales con su madre? Pocos. ¿No te parece?

– ¡Leche! – Dijo en tono de asombro como si hubiese dado en la diana. Había adivinado, sin conocerle de nada, que el sexo entre ambos no era del todo satisfactorio, ni en calidad, ni en número. – ¿Y en las parejas del mismo sexo?

– En las parejas del mismo sexo sucede exactamente lo mismo. De los/as dos, el/la que sea de mayor edad deberá colocarse a la derecha y el/la de menor edad a la izquierda, si no, se invertirán los papeles y la relación será entre padre/madre e hijo/hija. Si la pareja es de dos hombres, el mayor deberá estar colocado a la derecha del menor. Y si la pareja es entre dos mujeres, lo mismo. La mujer de mayor edad tendrá que estar a la derecha y la más joven a la izquierda. ¿Que se invierten los papeles? La relación será padre – hijo en el caso de ser dos chichos. Y madre – hija en el caso de que la pareja sea de dos chicas.

-Sara Estébanez-

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