¿Tienes la sensación que en más de una ocasión se te van repitiendo las situaciones vitales? Como si estuvieras en una noria y todo volviera otra vez a tu vida.
Todo tiene un porqué. Según vamos avanzando y cumpliendo años se nos van presentando situaciones correspondientes al nivel de conciencia y madurez que tengamos. El objetivo de esto es ir creciendo y aprendiendo.
Evidentemente, sino aprendemos, se repite la misma situación una y otra vez hasta que hayamos sacado el aprendizaje que le corresponde. Quizás no regrese bajo el mismo formato o con las mismas características que la primera vez, pero la intencionalidad es la misma, APRENDER.
Si en este momento estás pasando por una situación y tienes la sensación de estar atascado vamos a intentar darle la vuelta entre todos.
Escribe en un papel las características y circunstancias que estás viviendo ahora. Dedica el tiempo que necesites. Después haz una revisión de situaciones parecidas a lo largo de tu vida. Analiza igualmente, características, estados de ánimo en ti, repercusiones…todo lo que se te ocurra.
Haz un par de respiraciones profundas. ¿Te has dado cuenta de algo mientras hacías el ejercicio? Igual sí. Aun así, pregúntate ¿qué vienes a enseñarme? De primeras es probable que no venga ninguna información o respuesta clara. Reposa todo. Da tiempo. Llegará cuando menos lo esperes.
Procura no darle demasiadas vueltas a las situaciones para encontrar la respuesta. Si la mente está en calma, la solución llega con más claridad puesto que viene de la esencia interior no de la “cháchara mental”.
El ejercicio lo puedes repetir con cuantas situaciones creas o consideres que no se han solucionado en tu camino.
-Ruth Fernández-